Un atlas de paisajes modernos.
En Caixa Forum Barcelona, hasta el 11 de Mayo de 2014
Últimos días para ver la esta interesante exposición de esta gran figura en Barcelona. La muestra es un itinerario completo por todas las fases de la obra de Le Corbusier a través de una extensa colección de dibujos, pinturas, proyectos arquitectónicos y maquetas de edificios, piezas procedentes mayoritariamente de la Fondation Le Corbusier en París y del MoMA de Nueva York. El visitante podrá contemplar desde el trabajo realizado en los primeros años del artista en Suiza.
Le Corbusier fue uno de los artistas más influyentes y polémicos del movimiento moderno del siglo xx. Arquitecto, urbanista, pintor, diseñador de mobiliario, escritor, editor y fotógrafo y cineasta aficionado, unió el arte y la arquitectura, y asombraba gracias a la fuerza y la libertad poco convencional de sus ideas. Fue pionero en los estudios de mejora de las viviendas de las clases más bajas y propuso nuevas formas de arquitectura eficiente en ciudades muy pobladas.
Le Corbusier (1887-1965) nació en la pequeña ciudad industrial de La Chaux-de-Fonds, en el macizo suizo del Jura. A partir de 1917 estableció en París su estudio, donde trabajó para casi todo el mundo, y durante las seis décadas de su carrera profesional remodeló directa o indirectamente la fisonomía de distintas ciudades, desde América del Sur hasta la India. Se hizo famoso por su interpretación poética y a menudo provocadora de las tecnologías y los valores de la nueva era de las máquinas, trabajó en unos 400 proyectos arquitectónicos y construyó 75 edificios en una docena de países. Publicó también casi 40 libros y escribió centenares de textos, algunos de los cuales con influencia directa en la cultura moderna.
Se le ha acusado de haber concebido un estilo maquinista, no ligado a un lugar y centrado en el presente. Sin embargo, sus proyectos y su visión estaban profundamente arraigados en la naturaleza y el paisaje, desde la vista cuidadosamente enmarcada desde un interior de planta libre hasta el panorama natural en su sentido más amplio, pasando por el diálogo entre las ciudades en crecimiento y su territorio geográfico. Como artista que era, dibujaba y pintaba casi a diario, y captaba en su obra las conexiones espaciales entre naturaleza y edificaciones en las montañas de Suiza, en la costa mediterránea, en Italia, en el sur de Francia y en las grandes planicies del norte de la India.
Para Le Corbusier, la metrópoli emergente era también un paisaje, en el que un interior doméstico recién reconfigurado podía entablar una relación con una órbita más amplia de fuerzas naturales y humanas.